Insólito conflicto vecinal por el fútbol en una plaza
Padres denuncian que hay gente que no deja a sus hijos jugar a la pelota. Los vecinos señalan que una ordenanza lo impide y buscan preservar el espacio verde.
Un insólito conflicto por el uso de una plaza se desató en barrio Paso de los Andes. La situación enfrenta a padres que piden que sus hijos puedan jugar al fútbol con vecinos tradicionales que se oponen porque esta práctica molesta a otros usuarios de la plaza y destruye el mobiliario.
El espacio verde ocupa un terreno provincial entre las calles Félix Aguilar, Bobone y Paso de los Andes, y está repleto de juegos infantiles, bancos, plantas y elementos metálicos. Lo desmaleza el municipio y unos pocos vecinos lo mantienen. Un cartel advierte que no se puede jugar al fútbol y cita a la ordenanza 9.698, pero la Dirección de Espacios Verdes asegura que no lo puso.
Los padres denuncian que algunos vecinos "se adueñaron de la plaza con la excusa de su cuidado" y que "pusieron plantas con espinas y otros obstáculos para que los chicos no jueguen al fútbol". Pablo Iparraguirre, Paula Basel, Mariana Taneda, Julieta Gatica, Federico Amuchástegui, Marcela González y Sandra Buyán exigen, en nombre de "12 familias", que sus hijos "puedan jugar libremente" en "un espacio público que es de todos", al considerar que "la actitud de los vecinos vulnera los derechos de los niños a crecer en libertad".
Estos padres dijeron que presentaron denuncias penales porque los vecinos "son autoritarios, persiguen a los chicos, los amenazan y zamarrean". Agregaron que suelen llamar a la Policía "para que los eche de la plaza" a los niños.
En defensa de los vecinos aludidos por los padres, Juan Vega señaló: "Esta plaza la construimos con nuestro esfuerzo y dinero, la sentimos como propia y la queremos salvaguardar de que los chicos la destruyan".
Vega y otros vecinos como Isabel Eslava, Rodolfo Alaluf, Marcelo Vidal Sosa, César Ledo y Olga Aguilera dicen que hay "otros espacios cercanos" donde los chicos pueden patear una pelota. "Queremos preservar los juegos, las plantas y el mobiliario de la plaza, y no ahuyentar a quienes van a charlar, a tomar mate o llevan a sus bebés y sólo reciben pelotazos", plantearon.
Respecto de las plantas con espinas, Vega dijo: "Las colocamos por sugerencia del municipio para que los chicos no jueguen al fútbol, no por capricho".
Los padres entienden que se trata de una "problemática profunda" y para luchar por la accesibilidad a los espacios públicos conformaron la comisión "Pro-plaza para todos los chicos". Elevaron reclamos a la Defensoría de los Derechos del Niño provincial y a la Subdirección de la Niñez municipal, además de pedir la intervención de Espacios Verdes. Incluso, junto con sus hijos días atrás crearon un mural en la plaza y realizaron una radio abierta.
Por su parte, Vega y los demás vecinos invitaron a los padres a solucionar el conflicto a través del diálogo: "No queremos confrontar, sino buscar una solución juntos".
Qué dice la ordenanza. La ordenanza 9.698 deja claro que todos los ciudadanos tienen derecho a usar y disfrutar los espacios públicos en forma recreativa. Destaca que la práctica de juegos y deportes en espacios verdes puede efectuarse en "zonas específicamente limitadas" para evitar "molestias o accidentes de personas y daños a las plantas", como también para no "dificultar el paso" y "perturbar la tranquilidad".
Vega dice que los padres no respetan la ordenanza al instar a sus hijos a que jueguen al fútbol. Iparraguirre cree que no hay derecho a prohibir esa práctica.
A todo esto, el municipio alega que no puede intervenir en el conflicto salvo que medie "autorización provincial", al estar la plaza en un terreno que no es de su jurisdicción.
Temen por caída de árboles y el descuido de las veredas
Vecinos de la avenida Yrigoyen reaccionaron tras el derrumbe de un jacarandá. Quejas por veredas, cercos y rampas dañados.
Tras la caída sobre la vereda de un enorme jacarandá ubicado en bulevar San Juan casi avenida Yrigoyen, vecinos de este sector céntrico de la ciudad de Córdoba se mostraron preocupados por la falta de controles municipales de la arboleda y por el descuido del mobiliario urbano, que sufre constantes roturas.
El sábado pasado, una de las ramas del jacarandá que se desplomó por poco no le pega a una mujer que pasaba por el lugar. El susto fue mayúsculo y debió ser asistida por una ambulancia, por una crisis de nervios.
El árbol tenía más de 20 metros de altura y un tronco con un diámetro importante. Las ramas cayeron sobre un jardín frente al bar Golden. La empresa Crese trozó el ejemplar y lo retiró ese día.
Oscar Juliá, quien vive en la primera cuadra de avenida Yrigoyen, advirtió por el estado del árbol en varias oportunidades, al presumir que se vendría abajo, pero no logró que lo escucharan. "Si una rama caía encima de alguien, lo mataba; y si caía sobre un vehículo, lo destrozaba", cuestionó.
La caída de árboles secos o mal conservados es frecuente y se potencia en épocas de viento. Bastan algunos ejemplos de accidentes: tiempo atrás sobre bulevar Illia (cerca de la Terminal de Ómnibus) un árbol aplastó un vehículo; en Buenos Aires, una niña que jugaba en un arenero sufrió la caía de una rama sobre su cuerpo.
Roturas de todo tipo. Los vecinos se quejan por "los parches" que tienen las veredas de la avenida Yrigoyen, pese a que son casi nuevas. Señalan que la situación se origina por la instalación de cableados subterráneos.
Asimismo, advirtieron que durante los festejos del Bicentenario el público asistente a los recitales rompió varios cercos de hierro forjado que rodean árboles plantados en la primera cuadra de la Yrigoyen , y que el daño aún no se reparó. Los habituales cortes de tránsito en la avenida también molestan, ya sea por la realización de recitales populares, eventos deportivos y actos de gobierno como la reciente entrega de patrulleros policiales. En la misma esquina de San Juan e Yrigoyen, hay rampas para discapacitados destruidas, sin barandas de protección y con el plástico deteriorado. Otro problema es la carencia de luces de semáforos que permitan a los peatones cruzar por la avenida.
Los vecinos identificaron al menos siete puntos de la Capital en los que la basura avanza sobre la calzada. Algunos barrios afectados son Alta Córdoba, General Paz, San Vicente y Espora.
El problema del descontrol sobre el destino de cientos de toneladas diarias de residuos no sólo se refleja en los casi cien basurales de la ciudad de Córdoba: en varios lugares las montañas de basura también se apilan en las calles.
Uno de los más importantes es el de la calle San Alberto, entre Costanera y Obispo Maldonado, en San Vicente. Se trata de una cuadra que atraviesa dos predios abandonados: unos galpones y un terreno baldío.
En el sector el panorama es impresionante: montañas y montañas de todo tipo de basura, como escombros, restos de poda y hasta animales muertos. La basura es tanta que llega a impedir totalmente el paso de vehículos por el sector.
Del otro lado del río Suquía, la Costanera también está invadida por todo tipo de basura. El problema comienza pasando el vado Sargento Cabral, y va incrementándose a medida que se avanza hacia el puente Monteagudo, hasta convertirse en un paisaje deplorable a la altura del Campo de la Ribera.
Siguiendo la traza de la Costanera Norte , pero hacia el Centro, se encuentra la calle Américo Vespucio, en barrio Juniors. Esa arteria se convirtió en el destino predilecto de quienes arrojan basura en toda esa pujante zona.
En barrio Alta Córdoba, también hay otra calle que se convirtió en un basural. Se trata de Baigorrí, entre Santa Fe y Rodríguez Peña. Los residuos avanzan sobre la calzada que rodea la villa Los Galpones.
A pocas cuadras de allí, vecinos de barrio San Martín denunciaron que en la calle Videla Castillo, entre Martín García y General Guido, también se forma periódicamente un depósito de desechos.
Hacia el sur el problema también es grave. Por La Cañada , entre los puentes Kronfuss y Tronador apenas se puede circular por una sola mano, ya que la otra está totalmente ocupada por basura. Y en barrio Comandante Espora, la calle Alejandra Vieyra está invadida por los residuos.
La calidad del espacio público es la esencia de la ciudad
Para el titular de la Casa de Tejas, la capital se ha convertido en un sistema donde interactúa la metrópoli con otras localidades. Esto obliga a nuevas obras y políticas de planificación urbana…..09.08.2010
Convencido de que invertir en el espacio público genera un valor a la ciudad, el Gobierno de la Provincia de Córdoba puso en marcha una serie de obras tendientes a mejorar las áreas sociales.
¿Qué aportes hizo su administración a la actividad desarrollista?
Esto reafirma lo ya expresado en cuanto a la necesidad de revalorizar y promover su patrimonio histórico, cultural, arquitectónico y urbanístico. Es un aporte para los cordobeses, contagia el amor por su ciudad y el respeto a su historia y sus valores. Proyecta a Córdoba como opción turística nacional e internacional e impulsa la actividad económica y la oferta laboral. La calidad del espacio público, hace a la esencia del concepto de ciudad. No hay ciudad sin espacio público y esto debe orientar la acción del Estado. Es la forma de favorecer la actividad desarrollista privada. Los beneficios de estas obras no quedan circunscritos a ellas, proyectan un efecto dinamizador en el entorno alentando la inversión privada. Así, estamos trabajando para conseguir que nuestra Córdoba avance y vuelva a ser el faro que iluminaba el progreso, el pensamiento progresista y la modernidad de nuestra Argentina.
Esto reafirma lo ya expresado en cuanto a la necesidad de revalorizar y promover su patrimonio histórico, cultural, arquitectónico y urbanístico. Es un aporte para los cordobeses, contagia el amor por su ciudad y el respeto a su historia y sus valores. Proyecta a Córdoba como opción turística nacional e internacional e impulsa la actividad económica y la oferta laboral. La calidad del espacio público, hace a la esencia del concepto de ciudad. No hay ciudad sin espacio público y esto debe orientar la acción del Estado. Es la forma de favorecer la actividad desarrollista privada. Los beneficios de estas obras no quedan circunscritos a ellas, proyectan un efecto dinamizador en el entorno alentando la inversión privada. Así, estamos trabajando para conseguir que nuestra Córdoba avance y vuelva a ser el faro que iluminaba el progreso, el pensamiento progresista y la modernidad de nuestra Argentina.
Para recuperar espacios públicos:
El 21 de Octubre de 2009, Weber presentó su programa PISO Para recuperar espacios públicos a través del arte.
La empresa Weber, líder mundial en morteros industriales para la construcción, presentó su programa Plan de Infraestructura Solidario (PISO). El programa consiste en “el recupero de espacios públicos” a través del arte, gracias al diseño y la realización de murales. El proyecto se inició en 2007 con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la comunidad.
En la concreción de los 98 murales realizados a la fecha -elaborados siguiendo la técnica “trencadís”, que se basa en el uso de pequeños pedazos de cerámica de variados colores como principal materia prima y fue creada por los arquitectos catalanes Antoni Gaudí y Josep María Jujol- ya participaron más de tres mil personas entre artistas, vecinos, personal de la empresa y sus distribuidores.
En la concreción de los 98 murales realizados a la fecha -elaborados siguiendo la técnica “trencadís”, que se basa en el uso de pequeños pedazos de cerámica de variados colores como principal materia prima y fue creada por los arquitectos catalanes Antoni Gaudí y Josep María Jujol- ya participaron más de tres mil personas entre artistas, vecinos, personal de la empresa y sus distribuidores.
Axel Plesky, director de Comunicación de Weber, explicó que “el objetivo de la compañía es dejar obras que nos representen. Por eso, este proyecto llegó para quedarse por mucho tiempo y se ha transformado en uno de los ejes de nuestra comunicación.
Arte para todosEl arquitecto Rodolfo Sorondo se explayó sobre sus motivaciones al encarar esta iniciativa: “Decidí que el muralismo reúne todas mis vocaciones, ya que las obras deben responder a un entorno físico y social. Al formar parte de un espacio público, eso las pone en situación de consumo masivo: la sociedad las mira, las goza o las abomina. Y precisamente esa respuesta es la que hace más interesante a la plástica y
Florencia Delucchi, autora del mural “Siempre fui loco”, montado sobre una de las paredes del estudio de
Para concluir la conferencia, Marino Santa María indicó: “La intención de mis obras es crear un espacio de color para el habitante del lugar, rompiendo con la tradición del barrio, modificando el paisaje y mejorando su calidad de vida.”
Al respecto, quien recibió el Premio a las Artes Visuales 2002 de
En todo el país: Los murales diseñados por los artistas que participaron de la conferencia de prensa y otros, están emplazados en la ciudad de Buenos Aires y en distintas localidades del conurbano. Las obras fueron desarrolladas también en las ciudades de Córdoba, Mendoza, San Miguel de Tucumán y Salta, en Unquillo y Saldán en Córdoba; Resistencia, Roque Sáenz Peña y Villa Angela en el Chaco, y en Posadas y Oberá, en Misiones.